El servicio postal universal, destacó la CNMC, es el conjunto de servicios postales que deben garantizarse de forma permanente en todo el territorio, con determinados estándares de calidad y a precios asequibles para los usuarios. Correos recibe una compensación por el coste adicional que le supone cumplir con estas obligaciones de servicio público.

Esta carga financiera es tres millones y medio inferior a lo calculado por Correos, que indicó en su análisis que esta ascendía a 115.121.506 euros.

Por último, la cantidad final por liquidar en el ejercicio 2017 asciende a 111.690.271 euros, tras aplicar una penalización de 28.867 euros por incumplimiento de objetivos de calidad.