Así lo indicó Bal en rueda de prensa en la Cámara Baja, donde aseguró que “eso significa este acuerdo”. En concreto, “disparar con dinero a los nichos de votantes” con el objeto de poder “garantizarse la campaña electoral más larga y más cara de la historia que vamos a pagar con los impuestos de todos los españoles”.

A su juicio, las “prioridades” del Gobierno “no son” ayudar a familias, autónomos o a los negocios, sino que son “asegurarse los votos de funcionarios y de pensionistas” con unas subidas de pensiones y de salarios en la función pública que “no se pueden pagar tal y como está la economía española” actualmente.

Según Bal, este acuerdo de presupuestos consta con medidas “puramente electoralistas, propagandísticas y absolutamente populistas” que las van a pagar aquellos que se encuentren fuera de los citados “nichos de mercado de voto”. “Para estas personas no hay nada, el Gobierno no tiene nada”, lamentó.

Asimismo, aseguró que el Gobierno no va a “engañar” con este tipo de “pantomimas”, en relación a que no iban a llegar a un acuerdo. “Se pelean mucho en público, pero no creo que a nadie le cupiera duda alguna de que iban a conseguir este acuerdo para financiar la más larga y cara campaña electoral de la historia de la democracia española”, afirmó.

NEGOCIACIÓN

Al mismo tiempo, avisó de que a “este horizonte negro” que dibujan los PGE con medidas “electoralistas que no llevan consigo las necesarias reformas que España debe adoptar”, hay que sumarle que no se sabe “qué precio ponen los nacionalistas y los separatistas” para apoyar este acuerdo. “El panorama es terrorífico”, comentó.

“¿De un acuerdo entre el PSOE y Unidas Podemos que se fundamente en PNV, ERC y Bildu qué podemos esperar?”, preguntó, al tiempo que afirmó que “evidentemente” no serán las cuentas a las que Ciudadanos “pueda prestar su voto”. Pese a ello, se abrió a estudiar este acuerdo.

Asimismo, recordó que por el momento el Gobierno no se ha puesto en contacto con Ciudadanos para hablar sobre los presupuestos y destacó que si su partido entrase en la negociación de las cuentas presupuestarias pediría un pacto de rentas y un “reparto de sacrificios”.

“La competición entre PSOE y Podemos desemboca en una irresponsabilidad populista que acabarán pagando los de siempre. Todo sin contemplar reformas de calado y descontando la subasta entre los nacionalistas que convertirá las cuentas en un mercado de privilegio y desigualdad”, dijo la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, en sus redes sociales.

Asimismo, la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, apuntó en sus redes sociales que los nuevos presupuestos “siguen multiplicando la deuda y amplían las brechas sociales en lugar de reducirlas: entre pensionistas y jóvenes; entre funcionarios y trabajadores por cuenta ajena”. “Un Gobierno nacido para la economía y la cohesión”, agregó.