El motivo es el desfase temporal en la adaptación de precios minoristas a mayoristas, lo que provoca situaciones absurdas, dice el Gobierno, como que los tomates han bajado un 9,3% en el tramo mayorista en las últimas tres semanas. Sin embargo, la previsión de Comercio es que los tomates se encarezcan en las próximas semanas.

El caso de las naranjas, que sólo han subido un 6% en los mercados mayoristas en las últimas dos semanas, es otro ejemplo de este efecto retardado. Tras los daños de las heladas, los agricultores tratan de vender todo lo que pueden y generan sobreoferta, pero posteriormente los precios se dispararán, como está sucediendo en zonas libres de los efectos del frío, como en Huelva, donde los precios en el árbol de las naranjas se han multiplicado por cuatro.

En consecuencia, dos semanas después de las heladas, las acelgas habían subido en la tienda sólo un 10,7%, frente al 33,3% en origen y al 31% en los "mercas"; las judías verdes, un 13,1%, frente al 39,8% en origen y al 26% mayorista; las lechugas, un 9%, frente al 66,6% en origen y al 34,5% mayorista, o los pimientos verdes, que han subido un 4,3% para los consumidores, pero un 29,3% en origen y un 7,9% en los "mercas".

Una semana después, los precios mayoristas indican unatendencia descendente, excepto en lechugas y pepinos, que suben levemente. También "se han iniciado leves subidas en tomates, naranjas y mandarinas, donde las subidas podrían ser superiores en las próximas semanas", advierte Comercio.