Ciscar indicó que esa declaración recoge el criterio de que "es el PP el que debe intentar la formación del gobierno, buscando los apoyos necesarios, para poder superar la sesión de investidura", y ratificó que el PSOE votará "no" a la investidura de Aznar, por entender que ese es el mandato de sus votantes.

La declaración explica que el PSOE ejercitará "una oposición seria, rigurosa y constructiva, que será muy distinta a la que el propio PP y la derecha en Españahan ejercido en estos dos años y medio de legislatura".

La Ejecutiva acordó trasladar al Comité Federal de mañana una modificación del artículo 19 del Reglamento del grupo parlamentario socialista con el fin de establecer la división entre la presidencia del mismo y la figura del portavoz, que en la pasada legislatura estuvieron unidas. La presidencia la ocupará Felipe González, en tanto que el portavoz será Joaquín Almunia, según aseguraron a Servimedia fuentes socialistas.