Estos premios fueron constituidos por la ONG suiza Declaración de Berna con el fin de distinguir a las empresas que a nivel internacional han desarrollado una política comercial social y ecológicamente irresponsable.

Chevron, la ganadora en la categoría de medio ambiente, fue nominada por la ONG Amazon Watch por el alto grado de contaminación causado en los bosques del norte de Ecuador durante los últimos treinta años.

Por su parte, la multinacional de entretenimiento Walt Disney ha sido la ganadora en la categoría social, por las condiciones laborales de sus proveedores en el sur de China, donde existen malas condiciones laborales y se producen violaciones de los derechos humanos que ponen en duda su imagen de empresa "amigable", según Declaración de Berna.

En la categoría de impuestos, la ganadora ha sido Citigroup, por la supuesta cooperación que su filial, Citibank, ha tenido con la evasión de impuestos por parte de entidades y personas físicas. Según la ONG Tax Justice Network, en muchos casos los fondos fueron a empresas de Citigroup situadas en paraísos fiscales. Para esta ONG, la conducta ética requeriría que Citigroup deje de incentivar la evasión fiscal y el lavado de dinero.

El la edición del año pasado, en la que sólo hubo una categoría, el premio fue para la multinacional suiza del sector de alimentación Nestlé.