El vídeo grabado de los hechos no arroja luz sobre el incidente. En él no se ve a ninguno de los inmigrantes portando armas de fuego y mucho menos disparando contra el policía en contra de los rumores iniciales.

Las fuentes consultadas se inclinaron por la hipótesis de que la bala partió del arm de algún policía, guardia civil o militar participante en la refriega, aunque aún no hay pruebas concluyentes que avalen esta sospecha. Para conseguirlas será necesario analizar detalladamente la bala que aún no ha podido extraerse del cuerpo del agente herido.

Estos interlocutores confirmaron que la trayectoria de la bala en el cuerpo del policía es descendente, lo que puede significar que el disparo fue hecho desde arriba o que alcanzó a Arrebola como consecuencia de un rebote.

La investigació que está desarrollando el Ministerio de Justicia e Interior no concluirá en tanto la bala no pueda ser extraída del agente herido, cuyas condiciones físicas aún no permiten una intervención de estas características.

Una vez fuera, se podrá analizar de que tipo de proyectil se trata y averiguar que arma la disparó. Cada arma deja una huella particular en la bala que la hace identificable.

Por el momento, no hay ningun plazo previsto para la recuperación del proyectil. En estos momentos la situacin de Arrebola es grave pero evoluciona favorablemente, aunque su estado no aconseja, por el momento la intervención para extraer la bala.

El proyectil atravesó el pulmón del policía y se encuentra alojada en la espalda, cerca de la columna vertebral pero sin afectarla.

Fuentes policiales aseguraron que tras los rastreos hechos en la zona donde se produjeron los enfrentamientos, no se encontraron casquillos de bala y se quejaron de que, inmediatamente después de la refriega, el Ayuntamiento de Ceua ordenó la limpieza de la zona, lo que impidió la recogida de pruebas.