Entre estas medids, la patronal solicitó la moderación de la política de costes laborales y sociales, que se concretaría en unas subidas salariales iguales a la inflación prevista en los países centrales de Europa.

Asimismo, pidió unos presupuestos reestrictivos que supongan una reducción "drástica" del gasto público corriente. Para completar esta disminución, la CEOE pidió la supresión de organismos públicos innecesarios, y mejorar la eficacia en la gestión del desempleo, sanidad, empresas públicas con pérdidas y en l funcionamiento de los servicios públicos.

También solicitó estas mismas medidas para las autonomías y ayuntamientos, para contribuir a la reducción del déficit público.

Según informaron a Servimedia fuentes de la patronal, el comunicado se difundió tras la reunión del presidente de CEOE, José María Cuevas, el secretario general, Juan Jiménez Aguilar, y el responsable del departamento de Economía, José Folgado.

Asimismo, estos dirigentes mantuvieron contactos telefónicos con el vicepresidene de la organización, Arturo Gil, el presidente de la CEIM (Confederación de Empresarios Independientes de Madrid), Fernando Fernández Tapias, y el presidente de Confemetal, Carlos Pérez de Bricio.

En cuanto al análisis de la devaluación de la peseta, la CEOE la achacó al "deterioro de nuestra situación económica y la pérdida de confianza hacia España de los inversores internacionales".

Paralelamente, culpó de la negativa situación económica al "déficit público español, cuya financiación no ha heho otra cosa que distorsionar los mercados, y el crecimiento de los costes laborales y sociales a un ritmo muy superor al de los países con los que competimos".

Para la patronal, atribuir la devaluación a los movimientos especulativos externos contra nuestra moneda, o a un efecto contagio, "no pasan de ser explicaciones tabn inexactas como interesadas".

La organización empresarial denunció además la ineficacia de los intrumentos creados a nivel internacional para el sostenimiento de las monedas dntro de unas determinadas paridades.

FALTA DE CREDIBILIDAD

Por su parte, el Consejo Superior de Cámaras de Comercio afirmó hoy que la devaluación de la peseta ha supuesto una pérdida de credibilidad para nuestra moneda, y solicitó también medidas de ajuste "severo", para acabar con los movimientos especulativos y mejorar la competitividad.

En este sentido, apostó por una política presupuestaria restrictiva y una mayor moderación en el crecimiento de las rentas, que suponga menores costes y precos, para aprovechar las ventajas que la devaluación supone para nuestras exportaciones.

"Si no se produce este ajuste interno de nuestra economía, la devaluación se traducirá rápidamente en un aumento de las tensiones inflacionistas, en una mayor pérdida de competitividad y en futuras devaluaciones", aseguró esta organización.

PREDICCIONES

Por otro lado, el Centro de Predicción Económica (CEPREDE) consideró hoy la depreciación de la peseta como "insuficiente", y vaticinó nuevas pérdidas de posiiones de esa moneda.

También informó hoy que, según sus previsiones, la devaluación supondrá un incremento de las exportaciones del 1,4 por ciento, sobre su evolución actual. Paralelamente, se reducirán las importaciones en un 3 por ciento, lo que se traducirá en una disminución del 0,5 por ciento en el saldo de la balanza por cuenta corriente.

Asimismo, según sus análisis, la inflación crecerá solamente un 1 por ciento a medio plazo sobre lo previsto, situándola en 1992 por encima del 7 por cieno.