La central que dirige Antonio Gutiérrez señala que la presión fiscal en España es actualmente inferior a la media de la Unión Europea "debido al incumplimiento de las obligaciones fiscales y, en cierto modo, a la utilización de los incentivos y subvenciones como insrumento de política económica".

También considera que la caída del empleo y la reducción de los salarios reales son "la causa fundamental de la pobre evolución de los ingresos públicos en los dos últimos ejercicios", algo que, a su juicio, "se hace muy notorio tanto en la recaudación del IRPF como en la Seguridad Social".

Para CCOO, si no se introducen cambios sustanciales en los tipos del IRPF y del IVA, ni en las cuotas de la Seguridad Social, un aumento de los ingresos públicos sólo puede logrrse con más y mejor empleo, el incremento de lo salarios, la reducción de las subvenciones y las desgravaciones fiscales a las empresas, la elevación de los impuestos especiales sobre gasolinas, alcohol y tabacos, o la privatización parcial o total de empresas públicas.

El sindicato entiende que la vía elegida debe pasar preferentemente por la creación de empleo, la "disminución sustancial del fraude" y el recorte de beneficios fiscales a las empresas. Según sus estimaciones, eso permitiría unos ingreos adicionales de 700.000 millones en el 96, cantidad equivalente al 3 por cien de la recaudación total prevista para este año.