Según explicó hoy el sindicato, esta cuenta debe permitir a los clientes que tengan domiciliados sus ingresos realizar mensualmente cuatro disposiciones de efectivo por un importe máximo conjunto igual al de la retribución domiciliada, dos peticiones de saldo y el pago contra dicha cuenta corriente de los recibos de los servicios básicos, como el agua, la luz y el teléfono.

"Vista la polémica suscitada días atrás sobre el asunto del cobro de comisiones, tanto bancos como cajas deberían mejorar la transparencia y la pedagogía, informando de los costes reales del servicio que se presta y fijando criterios socialmente responsables a la hora de definir los conceptos a cobrar y las cuantías, para que no se produzca la exclusión financiera de los sectores más desfavorecidos: ancianos, parados o emigrantes", señaló.

A este respecto, afirmó que, "del mismo modo que la autorregulación solicitada no puede ni debe establecer tarifas por ser contrario a las normas de libre competencia", sería "conveniente" un "compromiso público" de las entidades financieras de eliminar los costes económicos "ocultos o explícitos" que pudiera tener un cliente para cambiar de banco o caja de ahorros.

Para el sindicato, esta autorregulación "tiene que incluir también un compromiso deontológico en la venta de productos basados en el interés del cliente".

Finalmente, reconoció que las entidades financieras prestan servicios y que estos deben cobrarse, pero recomienda a los usuarios bancarios que, como en otros ordenes, "evalúen los precios, el servicio y la calidad que ofrecen las diversas entidades antes de elegir la suya".