Según CCOO, la nueva estrategia fortalece muchas de las lagunas que existían en la anterior, introduciendo el principio de precaución, unificando los requisitos para todas las sustancias que se comercializan y prponiendo la prohibición de las más peligrosas.

Sin embargo, el sindicato también ha identificado algunas deficiencias en las nuevas medidas de control adoptadas por la UE y destaca que al nuevo sistema no se le asignn los recursos económicos suficientes.

Además, lamenta que los controles se apliquen sobre las sustancias que se comercializan en la UE, pero no sobre todas las que se producen, por lo cual se podrán exportar algunas sin someterlas a evaluación.