El estudio, publicado en el último número de la revista "Gaia", señala que el principal motivo de la desaparición de especies a nivel mundial se encuentra en la competencia que encuentran los animales autóctonos en otras especies reintroducidas en su medio de forma artificial.

En España, el grupo de especies más afectado es el de los peces, ya que un 30 por ciento de las especiesque en la actualidad habitan en los ríos españoles han sido introducidas.

Aunque el informe de la Coda sitúa la caza como segundo motivo causante de la extinción de especies animales, el estudio destaca que la actividad cinegética también tiene parte de responsabilidad en la introducción artificial de especies.

La fauna piscícola reintroducida en los ríos españoles era uno de los objetivos a menudo de la pesca deportiva, y en muchas ocasiones la introducción la han realizado las propias administrciones. Este es el caso del lucio, que llegó a España en 1949 procedente de Europa central; el blackbass, originario de Norteamérica; la trucha de fontana, el savelino alpino y el huchón o salmón del danubuio, introducido en 1968.

También entre los mamíferos y las aves destaca el estudio casos de "intrusismo", como el gamo, el muflón y el arruí, entre los primeros, y el faisán, el colín de California y el colín de Virginia, entre las segundas.

ESPECIES EXOTICAS

A estas especies hay que añadir auellas cuyo destino final es la cautividad, entre las cuales se encuentran las que acaban en granjas con fines peleteros, como el visón americano. En España, donde fue introducido a finales de los cincuenta y principios de los sesenta, hay localizadas en la actualidad tres poblaciones de visón americano independientes.

Finalmente, el informe cita la introducción de especies exóticas que son adquiridas como animales de compañía, entre las que se encuentra la cotorra de kramer y la cotorrita gris, que y ha nidificado en libertad en la Casa de Campo de Madrid.

La introducción de especies exóticas suele acarrear un impacto sobre la dinámica de las poblaciones nativas, alterando la vida de las comuniades autóctonas. A menudo se convierten en predadores de las autóctonas, que no cuentan con sistemas de defensa adecuados para hacer frente a los nuevos competidores y se ven obligadas a desplazarse.

Asimismo, la Coda destaca como perjuicios la hibridación entre especies similares, con la consiguiente ontaminación genética y pérdida de diversidad biológica y la transmisión de enfermedades y parásitos a los cuales las especies exóticas están ya adaptadas.