En una entrevista concedida a Servimedia, Maragall agregó que reclamará "el castellano como patrimonio de los catalanes" y explicará que el catalán "también es patrimonio de todos los españoles".

Bajo su punto de vista, en el futuro "Cataluña tiene que liderar un proceso autonómico más abierto, más amigable" en el que tenga cabida "el federalismo cultural". "Tenemos que explicar quiénes somos, cómo pensamos y en qué lenguas pensamos".

"Desde luego", añadió,"tenemos que reclamar el castellano como patrimonio de los catalanes, nuestro nexo tanto con los demás pueblos de España como con los pueblos de las Américas. De la misma manera, tenemos que explicar que el catalán también es patrimonio de todos los españoles. Tenemos que aprender a escribir la historia de los pueblos y culturas de España".

La política lingüística que desarrolle la Generalitat, continuó, "tiene que proteger las dos lenguas a capa y espada", "sin intervencionismo", "sin normas que impogan una lengua u otra", porque "no queremos que el catalán sea una flor de invernadero", sino actuar con visión de futuro.

Se refirió en este punto a las negociaciones con las productoras cinematográficas para aumentar el doblaje de cintas al catalán. Apostó por ser "más diestros en la negociación", "no hacer demagogia con el hoy" y "ser menos quejicas". De esta forma, dijo, las productoras "nos respetarán".

MODELO DE ESTADO

El candidato socialista tiene en mente un modelo de Estado que no descida los aspectos sentimentales de la relación entre Cataluña y el resto de España. "Queremos que vuelva a primer término la Cataluña abierta, los catalanes hermanos y amigos de España", aunque reconoce que en este momento predomina "la desconfianza y la suspicacia" sobre "el espíritu de cooperación y comunicación".

Cree además que España desea que Cataluña "deje de llevar la contraria y empiece a jugar un papel de liderazgo solidario", que para Maragall se debe materializar en un modelo de "federalism europeo", basado en el principio de subsidiariedad, que es "salvaguardia de la democracia frente a la burocracia única, la moneda única, el modelo único...".

En consecuencia, el sistema de financiación autonómica que propone Maragall es federal y debe conjugar "la autonomía y la capacidad de decisión de la Generalitat y de los otros gobiernos autonómicos con la solidaridad entre todos los ciudadanos españoles".

Por tanto, el candidato socialista propone "igualdad básica para que los gobiernos prsten y los ciudadanos reciban niveles similares de servicios".

Maragall cree que su propuesta, "bien planteada", puede ser secundada tanto por presidentes autonómicos socialistas como populares, porque favorece la devolución de poder a la sociedad que propugna el PSOE y "conviene al liberalismo económico, porque la descentralización favorece el mercado, disminuye el peligro del intervencionismo gubernamental y aumenta la posibilidad de acuerdos creativos entre la empresa y la Administración".

El andidato socialista propone extender ese acuerdo a la Universidad para crear un triángulo entre entidades educativas, empresas y Administración pública, a fin de propiciar "la ocupación, la investigación y el apoyo mutuo del sector público y el privado".

Bajo estas premisas, afirma que la compatibilidad entre los conceptos de socialismo y nacionalismo "es una batalla que ya no nos toca librar más que en las aulas universitarias. El socialismo federal y el catalanismo, tal como ya los hemos perfilado, on perfectamente compatibles".

ELECTORADO MADURO

Pasqual Maragall cree que, tras 20 años de gobierno de CiU, aún es posible que los ciudadanos sean capaces de desvincular el destino de Cataluña del destino del gobernante de turno: "Si no lo creyera, no me hubiera presentado. Los catalanes son votantes maduros. Sabrán distinguir las cosas".

Rechazó, por "absurdas", las acusaciones de Jordi Pujol de estar al servicio de los intereses del PSOE y de Madrid. "El PSOE es el partido hermano del PSC. Anamos fuerzas, no servimos el uno al otro".

Insistió en que la plataforma Ciudadanos por el Cambio tiene demostrada su "devoción a los intereses de Cataluña", al contrario que la Generalitat, que "sólo sirve los intereses de una parte bastante circunscrita de la población de Cataluña".

Defendió su campaña electoral, que ha sido criticada por "americanizar" la vida política española. "Hoy en día, mucha gente no se siente representada por los partidos tradicionales. Quieren respuestas creativas, queren alianzas sociales que vayan más allá de una adhesión estrictamente política, de derechas o de izquierdas o nacionalistas, para entendernos, y creo que nosotros lo hemos hecho. Si esto es 'americanizar' la vida política, pues así sea".

CRITICAS DE IC

Pese a que sus socios de IC hubieran preferido una alianza que incluyera a Barcelona, Maragall explicó que esa circunscripción se caracteriza por su "pluralismo". "Se trata", dijo, "de conseguir este objetivo común, el cambio, respetando la identida de cada agrupación".

Explicó que IC es una de esas formaciones afines, con las que el PSC tiene una larga tradición de colaboración en gobiernos municipales y, por ello, no despiertan su recelo algunos reproches venidos desde sus filas. "Las críticas leales siempre se encajan bien", indicó.

ESTABILIDAD

El candidato del PSC cree, como Pujol, que la estabilidad de España está en manos de Cataluña, pero "no de la misma manera". Maragall propone un cambio político y económico. En lo económico, defende el fortalecimiento del eje Baleares, Valencia, Aragón y Cataluña, por un lado, y del eje Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza, por otro.

Políticamente, "abundaremos en los Estatutos, en una lectura conjunta de la Constitución" que no entiende "por qué no se ha hecho antes". Para Maragall, "no hay que ir más allá de las leyes que ya existen para empezar a dialogar en España, en vez de tirar la piedra y esconder la mano, como se hace ahora".

A su juicio, este diálogo abierto asegurará la estailidad de una España transparente, que a través de él volverá a tomar protagonismo, y podrá influir tanto en el futuro de España como en el de Europa.

POLITICAS REDISTRIBUTIVAS

La subida de las pensiones ha abierto la puerta de la redistribución de la riqueza. Según el candidato socialista, los que deberían beneficiarse del avance en este terreno son las familias, poniendo el acento en aquellos casos que supongan problemas añadidos como la inmigración, la situación de jóvenes y mujeres y los mayores

Las principales propuestas en política social del PSC giran también en torno a la familia, a la sostenibilidad del Estado del bienestar, y del aumento de la ocupación.

Sus líneas prioritarias de actuación serán la promoción del empleo femenino y juvenil, la creación de guarderías y servicios de asistencia domiciliaria a mayores, la integración de inmigrantes y el impulso a las políticas de natalidad.

PINOCHET

En un asunto de plena actualidad como es el proceso de extradición del ex dictadr chileno Augusto Pinochet, Maragall insistió en su "compromiso personal con el largo y profundo proceso democrático de Chile" e incidió de nuevo en lo que hay de sentimental en su postura.

Recordó la amistad que le une a la hija de Salvador Allende y aseguró que "lo mejor para España, para Chile y para el futuro de la democracia es que funcionen los mecanismos internacionales. Que estudien, decidan, tomen resoluciones y apliquen una visión tan objetiva como sea posible".