Según informó hoy el gobierno regional, serán 18 millones de pesetas los que la Consejería aporte a estas dos iniciatvas, para tratar de paliar la situación de miles de familias que se encuentran en situación precaria, además de las que se quedaron sin hogar.

El consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas, ha destacado "el carácter solidario de esta región que, con los medios que posee, está siempre dispuesta a ayudar allí donde surge alguna necesidad, como es el caso ahora de Perú".

El proyecto de ayuda presentado por el MPDL se dirigirá, en un primer momento, a realojar a 100 familias que perdieron su hogar, aí como a ayudar a otras 500 que perdieron gran parte de sus pertenencias en el terremoto. Para ello está previsto el envío y la distribución de leche infantil, papillas, alimentos enlatados y no perecederos, carpas y tiendas de campaña, tanques de agua y medicinas.

Por su parte, Cruz Roja de Castilla-La Mancha ha solicitado a la Consejería la financiación necesaria para llevar también alimentos, medicinas, ropa de abrigo, agua y albergues temporales, centrando su actividad en los niños, que son los má afectados por el frío y la falta de alimentos y medios sanitarios.

La ayuda de emergencia que se envíe, a través de estas dos ONG, irá destinada a las localidades de Arequipa, Moquegua y Tacna, que fueron las más afectadas por esta catástrofe natural.