Según Fernández, pese a los buenos resultados que viene registrando la empresa en los últimos dos años, sus ventas por empleado son la mitad de las que tienen las empresas de la competencia.

La solución, apuntó, es la reducción de empleos mediante bajas incentivadas y prejubilaciones, pero no quiso cuantificar a cuantos trabajadores podría afectar, alegando que se trtará que sean los menos posibles.

Para lograrlo, citó el esfuerzo de la dirección en repartir la carga de trabajo y aumentar la productividad y las ventas, y expuso como ejemplo el traspaso de actividad de las fábricas del centro de España (Illescas y Getafe) a las situadas en el sur de la Península Ibérica.

Respecto a las negociaciones en torno a Airbus -proyecto paneuropeo en el que están Reino Unido, Francia, Alemania y España-, el presidente de CASA indicó que las negociaciones abiertas sobrela participación de cada socio serán muy delicadas y es muy probable que se prolonguen hasta 1999, ya que afectan a la parte de negocio más sustanciosa en cada una de las empresas que representan a sus respectivos gobiernos.