De origen incierto, la primera noticia que se tiene de esta celebración data de 1904, aunque los historiadores hablan de fiestas dionisíacas como base de los ritos del carnaval.

En el caso de Ginzo de Limia, su singularidad está en sus rituales: se inician cuatro semanas antes con el "Domingo Fareleiro", al que siguen el "Domingo Oleiros" con la 'caída d la olla' y el "Domingo Corredoiro", anticipo del verdadero carnaval. En este último día aparecen las primeras "pantallas", el símbolo de esta celebración.

El fin de semana siguiente comienzan los días fuertes del carnaval, que transcurren del sábado al martes, en los que al lado de los indios, los descubridores y los seres galácticos figuran los "farradeiros" y los "capuchóns".