En una nota de prensa, Cáritas señala que ha estudiado el contenido de ese plan y que ése recoge aspectos positivos en pro de la inclusión social de las personas más desfavorecidas. No obstante, destaca que esa iniciativa del Ejecutivo queda lejos de las expectativas de esta organización.

A juicio de Cáritas, entre los elementos positivos del plan están la creación de una unidad de seguimiento y evaluación del mismo, así como una comisión interministerial; el apoyo a las empresas de inserción y promover su regulación legal, y la necesidad de regular criterios básicos en la renta mínima d inserción.

Por contra, esta ONG cree que el plan es "incoherente" cuando propone respaldar desde el Ejecutivo la regulación de las empresas de inserción, pero se opone a hacerlo en el ámbito legislativo.

Cáritas también critica que las partidas presupuestarias previstas para los apartados de rentas mínimas de inserción y vivienda no cubren los análisis que esta ONG hizo llegar en su día al Gobierno.

Finalmente, Cáritas destaca que esa iniciativa no asume un compromiso decidido sobre los tems de salud mental y exclusión social, y que no se incremente al 0,3% del PIB el presupuesto destinado a la lucha contra la exclusión social.