LAS CARCELES FUNCIONAN PEOR QUE HACE 25 AÑOS EN ALGUNOS ASPECTOS, SEGUN EL VICEPRESIDENTE DE LA COMISION DE CAPELLANES
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"En algunos aspetos, las cárceles funcionan peor que hace 25 años", señala un informe elaborado por Evaristo Martín Nieto, vicepresidente de la Comisión Internacional de Capellanes Católicos de Prisiones, en el que repasa las garantías que ofrece el sistema penitenciario español para el ejercicio de los derechos de los presos.
Con motivo del congreso que mañana celebrarán en Sevilla los capellanes de prisiones para debatir "Los derechos humanos en la cárcel", Martín Nieto afirma que los aspectos en los que más se revla este retroceso son las medidas de seguridad y el derecho al trabajo de los presos.
Según el capellán, las actuales cárceles, "en lugar de fomentar el trabajo, fomentan la vagancia", cuando existen muchos trabajos que podrían realizar los presos en lugar del personal laboral.
Por otro lado, se refiere a la actual política penitenciaria, que incide especialmente "en aplicar con exceso" medidas de seguridad, "lo que acrecienta el distanciamiento entre funcionarios y reclusos, por lo que el tratamento se hace más ineficaz".
Martín Nieto recuerda en su informe que hace 25 años el trato era más humano y constante con el interno, aunque hubiera excepciones, mientras que ahora, "que tanto se habla del tratamiento, apenas hay trato".
El informe destaca sin embargo que "España ocupa un puesto de vanguardia en la protección legal de los derechos de los reclusos, aunque otra cosa es el ejercicio real de los mismos".
Así, subraya las dificultades que tienen los presos para disponer de una cela individual, lo que obliga a convivir forzosamente a muchos de los reclusos e impide el ejercicio del derecho a la intimidad personal.
Partidario de que el Gobierno construya cárceles en régimen abierto, en vez de centros de alta seguridad, Martín Nieto defiende una política de descriminalización que desviaría hacia estas últimas a las personas peligrosas que hayan cometido delitos graves.
Al tiempo que niega que los presos ejerzan el derecho a la libre comunicación, así como a reunirse y asociase, afirma que el 33 por ciento de los detenidos están en la actualidad en situación preventiva, lo que a su juicio demuestra que la justicia no actúa con rapidez.
Finalmente, señala que los presos extranjeros sufren discriminación, ya que no gozan de los mismos beneficios penitenciarios en igualdad de condiciones.
(SERVIMEDIA)
28 Oct 1992
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