La investigación realizada en el Reino Unido por el Centrode Estudios de Futuro y la aseguradora Churchill, subraya que algunos destinos turísticos mediterráneos, como Atenas, podrían alcanzartemperaturas superiores a los 40 grados centígrados.

En Italia, la región de la Toscana y las costas de Amalfy, podrían sufrir más olas de calor, con un incremento de los días secos y el riesgo de incendios forestales, mientras que las elevadas temperaturas podrían convertir el sur de España en un hábitat adecuado para los mosquitos que transmiten la malaria.

Estos expertos añaden, que en los próximos 14 años, el calentamiento climático erosionarían gravemente destinos remotos, como las costas de Goa en la India, mientras que otros lugares, hasta ahora menos saturados, alcanzaríansu capacidad máxima, este es el caso de Nepal, la Gran Barrera de Coral, el Valle de Katmandú y el parque natural de Everglades en Estados Unidos.

Esta situación podría obligar a los países de destino a adoptar medidas para proteger sus recursos naturales, como incrementar los impuestos turísticos, implantar cupos de entrada, y considerar la contribución del turista a fines sociales en el país visitado, antes de autorizar su viaje.

El pasado mes de Agosto, David Viner, climatólogo de la universidad británica de East Anglia, ya publicó un informe sobre el tema, aunque según su estimación, será en 2080 cuando se produzcan las consecuencias más graves del cambio climático en las costas Mediterráneas.

Según Viner, antes de 80 años, incendios forestales y plagas de medusas podrían convertir las costas del Mediterráneo en un destino turístico poco apetecible.