Este programa ha conseguido además recuperar "oficios perdidos", tales como el de deshollinador, lutier o pastelera artesanal, profesiones que aún hoy son el sustento económico de muchas familias.

Un ejemplo de ellos en un joven ecuatoriano que a sus 35 años se encarga de mantener impolutas las chimeneas de las casas de los madrileños, prestando sus servicios tanto a particulares como a grandes comunidades de vecinos de toda la región.

También ha encontrado una forma de vida otro joven argentino que construye instrumentos personalizados y a medida, aunque también centra parte de su actividad en la mejora, personalización y mantenimiento de guitarras y bajos.

Además, imparte cursos en los que los alumnos construyen su propio instrumento, a través de técnicas de construcción utilizadas por creadores de prestigio.

En la Pastelería Diferent de Barcelona no conocen los hornos industriales ni los ingredientes artificiales. Gracias a una filosofía legendaria que combina tradición y vanguardia, los amantes de los pequeños placeres pueden encontrar una gran variedad de suculentos productos de repostería.

Desde que Caixa Catalunya comenzó a proporcionar apoyo y financiación a través de su programa de Microcréditos en el año 2001, son muchos los emprendedores que han creado su idea de negocio. Así, entre los proyectos que se han llevado a cabo se encuentran negocios tan dispares como tiendas, peluquerías, restaurantes o talleres de danza, que tienen como denominador común haberse creado gracias a un microcrédito de Caixa Catalunya.