Así lo aseveró en declaraciones a los medios de comunicación previas a su asistencia al Pleno de la Cámara Baja y en las que se mostró “convencido” de que la iniciativa, que fue admitida a trámite con el respaldo de todos los grupos excepto Vox, saldrá adelante porque “es un mandato democrático de la sociedad española”.

“Y, además, manda un mensaje muy importante, que es que, en tiempos convulsos y, sobre todo, frente a aquellos que amenazan nuestras libertades fundamentales, la democracia se defiende ampliando derechos y no recortándolos”, sentenció.

En concreto, la iniciativa legislativa plantea buscar "mecanismos que garanticen que dichas personas puedan salir de la situación de invisibilidad y ‘no derechos’ como consecuencia del estatus migratorio irregular".

Ya el martes, en sus redes sociales, el ministro defendió que la #ILPRegularizacion “es una cuestión de derechos humanos” además de un “mandato de la sociedad española”. “También es una brújula para este tiempo convulso: la democracia no se defiende reculando sino ampliando derechos”, resolvió.