BOTULISMO. LAS VENTAS DE LA CADENA DIA NO DISMINUYERON POR EL CASO DE BOTULISMO
- Los análisis confirman botulismo tipo A, que puede producir alteraciones en el sabor de los alimentos
- Nunca se sabrá cómo adquirieron el virus las alubias, al faltar éstas y el envase
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Los técnicos del Instituto Nacional de Toxicología de Majadahonda creen que María Luisa Díaz y Vicnte Morant, las dos víctimas de una intoxicación alimentaria que permanecen en la UVI, padecen botulismo del tipo A, pero hasta mañana no tendrán los resultados definitivos, afirmó hoy a Servimedia el doctor Rafael Cabrera.
Los expertos están analizando el suero de ambos pacientes, que el pasado 28 de febrero probaron unas judías blancas a la vinagreta que tenían mal sabor y que procedían de un tarro que había sido comprado en un establecimiento de la cadena Dia de Madrid.
Después de ver su mal etado, Díaz arrojó el tarro y el resto de las legumbres a la basura. Al día siguiente, Morant sufrió lo que parecía una embolia cerebral y hoy el hospital Gregorio Marañón, donde está internado, certificó que tiene botulismo tipo A.
Según explicó a esta agencia Javier Lacalle, portavoz de Dia, han sido retirados del mercado nacional no sólo los tarros de alubias blancas, el producto que presuntamente originó la intoxicación, sino también los de garbanzos y otras legumbres preparados por las dos conservras que trabajan para la distribuidora.
Lacalle añadió que, a primeras horas de la tarde de hoy no tenía conocimiento de que los 1.500 establecimientos de la cadena hubieran registrado un descenso significativo en la entrada de clientes como consecuencia de la difusión del caso de botulismo.
Por su parte, fuentes de la Consejería de Salud señalaron a Servimedia que ya han sido tomadas todas las medidas que había que adoptar y que no harían más declaraciones.
El doctor Cabrera aseguró que nuna se conocerá con total seguridad el origen del brote, porque no se conserva el tarro de judías blancas, supuestas causantes del mismo.
Sí es cierto, contra lo afirmado ayer por un conservero, que podrían saber mal, explicó el científico, porque el botulismo de tipo A (americano) sí puede descomponer la comida y causar alteraciones de olor o sabor, a diferencia del de clase B, propio de Europa.
Pero nunca se sabrá quién tuvo la culpa: si fue del fabricante, si el envase sufrió golpes o aperturas or el camino hacia el consumidor o fueron las propias víctimas quienes manipularon o almacenaron mal el alimento.
(SERVIMEDIA)
09 Mar 1994
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