Preguntado si esto es un nuevo problema para el PSOE, Yáñez dijo que "el problema es para el Gobierno. Hubo una filtración no querida, que no hizo nadie del gabinete de la Oficina del Candidato, porque éste era partidario de matener ese asunto en la discreción. Esa primera filtración hablaba, la agencia de noticias correspondiente, cada uno es responsable de lo que dice, hablaba de inspección fiscal, pero nadie se ha hecho responsable de esa filtración, luego nadie puede decir dónde está el error. Del gabinete, de la oficina del señor Borrell no, quien lo dijera y como esa fuente es desconocida... Yo puedo asegurar que esa filtración no la hizo nadie de la Oficina del Candidato".

"Lo que si es cierto, y es el meollo de la cestión", agregó, es que el señor Borrell ha recibido un requerimiento del Ministerio de Economía y Hacienda pidiéndole o investigándole su situación fiscal, concretamente del año 97".

"El señor Borrell, lo dijo ayer muy claro, está a la total disposición de los inspectores, en cuya profesionalidad tiene absoluta confianza y no tiene nada que ocultar. Tiene la mayor tranquilidad de conciencia y la seguridad de haber cumplido con sus deberes fiscales en todo momento", aseguró Yáñez.

"Pero, dicho es por él, que no quiere ningún trato de favor, que quiere ser un ciudadano más", dijo Yáñez, mi interpretación, la que hace Luis Yáñez, la que hace la inmensa mayoría de los socialistas, es que se trata de una persecución política en toda regla. Es decir, no puede ser casualidad que justamente cuando estábamos y estamos denunciando el escándalo Piqué, que es algo que clama al cielo, se produzca un requerimiento por parte de Hacienda al líder de la oposición, en el mejor estilo macartista de las mejores épocs".

"Por eso le digo que el problema es para el Gobierno", afirmó Yáñez. "El Gobierno tiene que responder ante algo muy grave que no ha ocurrido nunca en veintitantos años. Ni Felipe González fue perseguido fiscalmente pr la UCD, ni Fraga, Hernández Mancha o Aznar recibieron nunca un requerimiento fiscal por parte de los gobiernos socialistas. Ese es el meollo de la cuestión y es el que el Gobierno debe de responder, mientras tanto el señor Borrell resolverá lo que le pidan de documentación o de aclarción o de ampliación los inspectores de Hacienda".

"Por cierto", concluyó, "la presidenta de la asociacion de subinspectores fiscales, es decir los profesionales, dice también que eso no es el producto del azar, no es el producto de la casualidad, hay una intencionalidad política en ese documento que ha recibido el señor Borrell. ¿Dónde está el problema? Desde luego en el Gobierno".