Así lo aseguró el propio ministro, José Bono, en su respuesta al diputado de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) Joan Puig durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados.

La fragata "Baleares", de 133 metros de eslora, 14 de manga y 7,5 de calado, fue retirada de servicio en marzo de este año y se encuentra fondeada en el puerto de Ferrol. La previsión del Ayuntamiento de Calvià es que sus 4.177 toneladas de peso fueran depositados sobre un fondo arenoso a unos 30 ó 40 metros de profundidad.

Bono precisó que el Ministerio no accederá a esa petición "porque no somos especialistas en materia de hundimiento de buques para que se conviertan en arrecifes artificiales, pero somos respetuosos con el medio ambiente".

Según explicó, la titular de Medio Ambiente comunicó por carta a Defensa que esa operación "no tiene sentido" y en el Ministerio "nos hemos puesto a la orden de quien en esta materia tiene que decidir. Tenemos el convenio de que ella no habla de asuntos militares y nosotros no hablamos de medio ambiente".

"Ha dicho la ministra de Medio Ambiente que no se puede hacer, y cuando Roma locuta, causa finita, aquí acabó este asunto", concluyó el ministro.