BODA INFANTA. LA CEREMONIA, MARCADA POR EL PROTOCOLO Y LA SEGURIDAD

MADRID
SERVIMEDIA

En la catedral de Sevilla todo estará dispuesto para la ceremonia de mañana, cuando a las 12,27 del mediodía la novia, la infanta Elena, entre del brazo de su padre en el templo por la puerta de Campanillas.

El cortejo nupcial, compuesto por la infanta Elena, del brazo de su padre y padrino, la Reina, el Príncipe de Asturias y la infanta Cristina, del brazo del infante don Carlos, saldrá del Real Alcázar a pie por la puerta del León, en dirección a la catedral.

El Caildo catedralicio recibirá a don Juan Carlos y a la infanta a la entrada del templo. En el altar mayor ya estarán esperando el novio, Jaime de Marichalar, y la madrina, Concepción Sainz de Tejeda.

SITUACION

Los novios se encontrarán frente al altar mayor, justo en el centro de una gran plataforma instalada a los pies de una escalera de mármol. Jaime de Marichalar estará a la derecha de la infanta durante la ceremonia. Ambos se sentarán en unos taburetes tapizados en rojo y ribetes en dorado. Tendrána sus pies unos cojines, también rojos, para apoyar las rodillas en los momentos en que tengan que arrodillarse.

Los reyes don Juan Carlos y doña Sofía estarán situados a la izquierda de los novios, acompañados por sus hijos, el príncipe Felipe y la infanta Cristina.

La madrina, condesa viuda de Ripalda y madre de Jaime de Marichalar, se sentará a la derecha de los novios. Los testigos al enlace matrimonial tomarán asiento a la espalda de la madrina en cuatro bancos.

El repertorio musical dela boda, que será interpretado por la Orquesta Sinfónica de Sevilla y el Coro de la Orquesta Nacional de España, estará compuesto por la "Misa en re mayor de la Coronación" y el "Ave Verum" de Wolfang Amadeus Mozart, la "Tocata y fuga en re menor" de Juan Sebastian Bach y el "Aleluya" de Haendel.

CEREMONIA

La ceremonia, oficiada por el arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo, se prolongará durante aproximadamente una hora y a ella asistirán los 1.300 invitados que, una vez concluido el acto, se trasladarn al Real Alcázar, donde a las 14,30 se servirá el banquete.

Además de familiares y amigos de los contrayentes, asistirán a la boda representantes de casas reales de todo el mundo, el Gobierno en pleno, los presidentes de las más altas instancias y de las comunidades autónomas, representatantes de las Fuerzas Armadas, de las Reales Academias y de la Iglesia.

Mientras los invitados se dirigen al Real Alcázar, los nuevos esposos se trasladarán en una carretela tirada por seis caballos hasta la igleia del Salvador, donde doña Elena depositará su ramo de novia ante la tumba de don Carlos de Borbón Dos Sicilias y doña Luisa de Orleans, padres de la Condesa de Barcelona, donde se rezará una salve y estará en pleno el Ayuntamiento de Sevilla.

SEVILLA EN LA CALLE

El paseo hasta la iglesia del Salvador será con toda probabilidad el acto más popular, ya que se prevé que más de 100.000 personas saludarán en la calle a los recién casados.

Los seis caballos llevarán la calesa desde la catedral pasado por la plaza Virgen de los Reyes, calle Placentines y Alemanes, avenida de la Constitución, Plaza de San Francisco, calle de Manuel Cortina y Plaza del Salvador, lugar donde se encuentra la iglesia del Salvador.

La corporación municipal recibirá en el templo a doña Elena y Jaime de Marichalar, que, tras depositar su ramo en la tumba de sus bisabuelos y rezar una salve, en la misma calesa regresarán al Real Alcázar para asistir al banquete.

Un total de 17 caballos montados por miembros de la Gurdia Real acompañarán a la calesa nupcial, que llevará a la infanta Elena y Jaime de Marichalar por las calles de Sevilla. Cinco jinetes de la Casa Real uniformados de gala precederán a la calesa, mientras que otros doce cerrarán el cortejo detrás del carruaje.

Una vez en el Real Alcázar y antes de servirse el menú, la pareja posará con su familia más directa para los fotógrafos en el Patio de la Montería.

ULTIMO ACTO OFICIAL

A las 19,30 horas, los Reyes acudirán al Ayuntamiento hispalense, done don Juan Carlos entregará la bandera de la ciudad a la corporación municipal de Sevilla.

Esa misma noche los Reyes ofrecerán una cena íntima a los familiares más directos de los contrayentes, para después acudir a un pequeño concierto ofrecido por los ministrales, que interpretarán desde la Giralda varias piezas de música, acompañados por varias voces polifónicas y un espectáculo de fuegos artificiales y luces.

(SERVIMEDIA)
17 Mar 1995
L