No obstante, su diputado en el Congreso, Néstor Rego, advirtió de que este proyecto "dista mucho de solucionar los problemas por los que atraviesa la sociedad" y de que "aún no tiene el sentido del voto" decidido y tiene "todas las opciones abiertas, incluido el voto en contra, para la votación final".

El BNG dice estar "abierto a dialogar con el Gobierno para negociar y mejorar el proyecto", con demandas como el aumento de las inversiones territorializadas para Galicia, especialmente en infraestructuras ferroviarias y servicios. Por ejemplo, reclama una mayor inversión en proyectos ferroviarios, como la implantación de las cercanías ferroviarias en las áreas urbanas y sus zonas de influencia en las ciudades gallegas, así como partidas específicas para el saneamiento de las Rías o la inyección de inversión que permita solucionar la crisis industrial.

Por otra parte, pide el aumento del gasto social para “desplegar una política social” que ayude a paliar las consecuencias generadas a raíz de la guerra de Ucrania, con una mayor subida para las pensiones mínimas, hasta el 60% del salario medio, la subida del SMI y del salario de empleados públicos conforme a la inflación y la renuncia al aumento del gasto militar. Asimismo, pide garantizar la financiación en materia de dependencia, así como desplegar una política de vivienda pública contando con los activos de la Sareb.

El PDeCat y Coalición Canaria también han anunciado que no presentarán enmiendas a la totalidad al proyecto de Presupuestos, mientras que Junts per Catalunya ha avanzado que sí lo hará.