Se trata de estancias de diez días de duración en la playa, en localidades de la costa andaluza como Marbella, Torremolinos o Punta Umbría, dirigidas a mayores de 15 años y menores de 45, con una discapacidad igual o superior al 33%, y, cuando éstos lo precisen, a sus acompañantes.

Es una actividad que goza cada año de una gran aceptación entre este colectivo, y que, según el director general de Servicios Sociales, Juan Carlos Campón, pretende facilitar a las personas con discapacidad el libre acceso a los recursos de ocio, tiempo libre, deportes y cultura.

También se quiere favorecer la participación e integración de los menores y jóvenes con discapacidad en las actividades normalizadas de campamentos y albergues para la población infantil y juvenil.

El presidente del Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), Eusignio Iglesias, manifestó que este programa viene muy bien como respiro a las familias de los discapacitados, cuya situación es en ocasiones muy difícil, por la gran dependencia de estas personas, y no pueden desplazarse con ellos para ir de vacaciones.