MADRID

BETETA DICE QUE ES "FALSO" QUE LA COMUNIDAD QUIERA TENER TODOS LOS COMERCIOS ABIERTOS LAS 24 HORAS

- Dice que la nueva Ley de Modernización del Comercio generará menos inflación y más empleo

MADRID
SERVIMEDIA

El consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid, Antonio Beteta, aseguró hoy que es "una falsedad" que con la nueva Ley de Modernización del Comercio, el Gobierno de Esperanza Aguirre pretenda que todos los establecimientos permanezcan abiertos las 24 horas.

Beteta, que presentó hoy las principales novedades que ofrece esta normativa, que entrará en vigor mañana, explicó que la ley no obliga a todos los comercios a abrir las 24 horas, sino que les da libertad para que puedan actuar según su propio criterio y propicia la adecuación de la oferta y la demanda.

El consejero subrayó que, con la entrada en vigor de la nueva norma, se eliminan o simplifican múltiples trámites burocráticos que actualmente sufren los comerciantes, y recordó que a partir de ahora sólo prohíben abrir entre las 12 de la noche y las 7 de la mañana las comunidades autónomas de Galicia y Cataluña, por lo que Madrid se ha sumado a la inmensa mayoría de las regiones españolas que no establecen tal prohibición.

Además, indicó que la comunidad madrileña será la primera en aplicar el llamado "silencio positivo" en las solicitudes de autorización para la apertura de grandes establecimientos, reduciendo a la mitad los plazos para resolver estos procedimientos.

En todo caso, destacó que la norma, apoyada por CEIM, en la que se integran las asociaciones más representativas del sector, va acompañada este año con 45 millones de euros en ayudas al pequeño comercio para su modernización a través del denominado Plan FICOH, de los cuales en el primer semestre ya se han concedido ayudas por importe de 28,5 millones, que repercuten directamente en 15.000 pymes, generando una inversión superior a 70,3 millones.

MENOS INFLACIÓN

Asimismo, Beteta manifestó que las medidas liberalizadoras de la Administración regional se han traducido en más actividad comercial y empleo y menos inflación, lo contrario que en otras comunidades con políticas más restrictivas en lo comercial, como Cataluña.

El consejero explicó, en primer lugar, que si hasta ahora la autorización de grandes establecimientos comerciales se regulaba dependiendo de su tamaño y de la población en la que se ubicaban, a partir de ahora se simplificará este procedimiento y serán considerados como tales los de más de 2.500 metros cuadrados, que es la superficie que marca la Ley básica del Estado.

Además, insistió, no hará falta autorización autonómica para cambios de titularidad o para las ampliaciones, salvo cuando superen el 30% de la superficie inicial. Asimismo, la resolución de las autorizaciones para establecer un gran centro comercial se reduce de 8 a 4 meses, con aplicación del "silencio administrativo positivo", cuando hasta ahora era negativo.

En cuanto a la actividad ferial, se sustituye el régimen de autorización desde la Comunidad de Madrid por el de comunicación previa en todas las ferias y exposiciones comerciales, de manera que se prevé un mayor dinamismo en este sector.

Respecto a la eliminación de trabas burocráticas, la nueva ley suprime la obligada inscripción en diversos registros comerciales para poder iniciar la actividad comercial, como el de Actividades y Empresarios Comerciales o los de Franquiciadores y Empresas de Venta a Distancia.

Según Beteta, la supresión de estos trámites allanará el ejercicio de la actividad por los comerciantes, evitando además duplicidades, dado que en el caso de franquiciadores o de ventas a distancia ya existen registros en el ámbito estatal.

Asimismo, explicó que se suprimen los procedimientos de autorización administrativa para la implantación de determinados establecimientos comerciales minoristas, singularmente medianas superficies (supermercados, cadenas de moda, hogar, deporte o juguetes), ya que merman la eficiencia empresarial y suponen duplicidades de trámites con las licencias municipales.

El consejero señaló que la nueva ley reconoce el principio de libertad del comerciante para determinar el horario de apertura y cierre de sus negocios en laborables y en los festivos permitidos, de acuerdo con la propuesta efectuada desde el sector empresarial y consensuada previamente en CEIM, y que obtuvo el respaldo del dictamen del Consejo Económico y Social de la Comunidad de Madrid.

Recalcó que el principal objetivo de la normativa es conseguir una mayor competitividad, generación de empleo y adecuación de los horarios a las nuevas necesidades de los consumidores.

Dio cuenta de un sondeo de las universidades Autónoma y Rey Juan Carlos, que refleja que el 91% de los encuestados reconoce que los hábitos de compra han cambiado, mientras que un 71% reclamaba que el comercio adapte sus horarios a las necesidades reales de los clientes.

Beteta quiso también desmentir el "falso tópico" que ha venido circulando de que el Ejecutivo de Esperanza Aguirre no cuida al pequeño comercio e insistió en que la Comunidad de Madrid ha conseguido que su política comercial liberal, con mayor apertura en festivos (22 al año) y la declaración de zona de gran afluencia turística de barrios como el de Sol, se traduzca en menor inflación y más empleo en el sector, que en este último caso ha supuesto ya la contratación de 622 personas.

(SERVIMEDIA)
11 Jul 2008
CAA