Lo hizo en un mitin de la campaña electoral andaluza en Dos Hermanas (Sevilla), el tercero y último en que el que participó ella, y en el que se refirió al rechazo de la Mesa del Congreso, con los votos del PSOE, PP y Vox, a tramitar una proposición de ley del PNV que pretendía acotar la inviolabilidad del Rey.

Belarra, que comenzó dando las gracias a la militancia de los partidos que forman la coalición electoral Por Andalucía (“de Podemos, de Izquierda Unida, del resto de organizaciones”, bosquejó, sin llegar a nombrar a Más País, el partido de su excompañero en Podemos Íñigo Errejón), terminó pidiendo el voto para la candidatura porque “hace falta gente que no tenga miedo a decir la verdad” en la Junta y el Parlamento de Andalucía.

Como ejemplo, citó como verdad que “el problema de la monarquía no son los negocios corruptos del Rey emérito”, sino que la monarquía en España “es el espacio perfecto para la corrupción”, la “posibilidad de cometer cualquier delito sin que te pueda ocurrir absolutamente nada”.

Aquí hizo la referencia a que “esta mañana volvíamos a ver la vergüenza en el Congreso de los Diputados”, y remató: “Es una vergüenza y alguien tiene que decirlo en el Parlamento andaluz y en la Junta".

MÁS CONTRA EL PSOE

Como otras veces en la campaña, la líder de Podemos llamó a ir a votar frente a quienes “os piden que elijáis entre la resignación de quienes llevan décadas gobernando esta tierra dejándose a la mayoría de la gente atrás”, en clara alusión al PSOE, “y la desesperanza de una derecha que no tiene otro proyecto político que el odio”.

Belarra ya había descrito al Gobierno andaluz de Juan Manuel Moreno como “incompatible con la vida”, por estar “desmantelando lo público” y, por ejemplo, haber rechazado el dinero de su Ministerio “antes que construir una red de escuelas públicas infantiles”, porque “es un fundamentalista de lo privado”.

Al PP también le recriminó que “nunca dejamos de conocer casos de corrupción” de ese partido, ahora con el caso de las mascarillas en el Ayuntamiento de Madrid, del que dijo que es una indecencia” pero “ése es el modelo de gestión del PP” porque “da igual que hablen muy suave” como Moreno, porque los populares “piensan que las instituciones son su cortijo privado”.

Finalmente, espetó al PP y Vox que no aceptan de ellos “ni media lección de patriotismo de quien desprecia lo que somos”, pues ellos “desprecian la mayor parte de lo que nuestro país es”, y se declaró orgullosa de estar construyendo desde el Gobierno “un país que merece la pena” y en el que por primera vez se “ata en corto a las empresas energéticas” en cuyos consejos de administración los políticos de la derecha aspiran a colocarse.