Belarra acompañó en un paseo por Cartagena al cabeza de lista de Sumar por Murcia y dirigente de Podemos, Javier Sánchez Serna, y en sus declaraciones posteriores empleó esta doble fórmula: por un lado, “coalición entre Podemos y Sumar”, el enfoque bilateral que pretendía su partido y que finalmente fue desestimado al firmarse un pacto multilateral bajo la marca Sumar, y, por otro, el reconocimiento de dicha marca como único sujeto que firmaría un acuerdo de gobierno con el PSOE.

La líder de Podemos se congratuló de que Sánchez Serna “vuelve a encabezar ‘nuestra’ candidatura”, y dejó un mensaje típico de su partido pero que sintoniza con los que lanza la candidata de Sumar a la Presidencia del Gobierno, Yolanda Díaz: la advertencia de que las elecciones “son un intento de restauración del bipartidismo”, porque el PSOE y el PP “quieren recuperar el sistema del turno” en el que “nada de lo que tiene que cambiar en este país cambia”.

Belarra reivindicó que “el único voto que sirve para frenar de verdad a las derechas y que sirve para seguir avanzando en derechos feministas sociales y ecologistas es el voto a la coalición entre Podemos y Sumar”, y alertó de que tras los comicios podría volverse a la situación de 2016, cuando el PSOE se abstuvo para permitir la investidura de Mariano Rajoy. “Paradójicamente los votos al Partido Socialista pueden servir en último término para que gobierne la derecha”, advirtió.

Dando por hecho un próximo Gobierno del PP y Vox en la Región de Murcia (“Al señor López Miras se le está poniendo cara de María Guardiola”, metaforizó, citando el ejemplo de Extremadura), Belarra sostuvo que en España se necesita “un Gobierno de coalición en el que Sumar tenga más fuerza para poder intervenir” las competencias autonómicas sobre el Mar Menor. “Os pido el voto especialmente en la Región de Murcia para Javi y para la coalición de Podemos y Sumar”, remató, suscribiendo el análisis de que el voto a esta candidatura “vale doble”, muy repetido en el mitin de Díaz hoy en Valencia.

Sánchez Serna ya había alegado esta doble utilidad, la de frenar a la derecha y lograr avances en el eventual Gobierno de coalición progresista, pero en su caso se refirió al “voto a la coalición Sumar”, más ajustada a la fórmula electoral con la que se presenta la candidatura. Eso sí, la razón que citó para defender la importancia de la presencia de Sumar fue “el tope al gas que comenzó a pelear Ione Belarra en el Consejo de Ministros cuando el PSOE le decía que no se podía”.