Así lo explicó el responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech, este viernes en la presentación del informe trimestral ‘Situación España’ expuesto este jueves junto con el economista jefe de Grupo BBVA, Jorge Sicilia, y el economista jefe para España, Miguel Cardoso.

En su análisis, Doménech resaltó que los efectos disuasorios para penalizar la contratación temporal son “dudosos”, pero la apuesta por la contratación formativa es “bienvenida”, aunque espera que “vaya más allá del diseño y tenga una ejecución efectiva que permita una mejora de la formación de los trabajadores”, en especial “aquellos que tienen más dificultad para conseguir empleo”.

En cuanto a los cambios en la negociación colectiva, el experto resaltó que no son “lo que nos hubiese gustado”, pero van a tener “un efecto reducido” porque la cobertura de los convenios de empresa “ha sido reducida” y porque, aunque se recupera la ultraactividad, “la mayor parte de convenios colectivos estaban sorteando ese decaimiento de la ultraactividad que se produjo en la reforma laboral de 2012”.

Por otro lado, Doménech señaló que los “nuevos mecanismos de flexibilidad interna” que se han puesto en marcha como la simplificación de procedimientos y plazos de los ERTE “puede impulsar la flexibilidad interna”. Asimismo, mostró las “expectativas” generadas por el mecanismo RED “para mitigar la destrucción de empleo” y subrayó estar “a la espera” sobre cómo se van a ir implementando estos mecanismos.

El experto deseó que se apueste por la “ejecución efectiva” de la reforma laboral, de la que espera que supere su tramitación en el Congreso, donde todavía no tiene asegurada su aprobación por la negativa de los socios habituales del Gobierno, ERC y EH Bildu.