En una rueda de prensa tras la reunión de la Ejecutiva del PNV en la que se decidió oficialmente su voo en el Congreso de los Diputados, Arzalluz reiteró que su partido se opone a la ilegalización, no por defender a Batasuna, pues "son mayorcitos para defenderse", sino por "principios".

Explicó que la Ley de Partidos "socava" elementos fundamentales del sistema democrático, pues no se puede ilegalizar un partido por no condenar el terrorismo. Agregó que el rechazo a la ilegalización obedece también a razones "prácticas", pues hacer que quienes estaban en esta formación pasen e la "clandestinidad" no hrá sino aumentar la "crispación social".

Por ello, auguró que la ilegalización supondrá "el fracaso del propio Estado" y criticó que el Gobierno haya implicado en esta iniciativa a partidos, instituciones e incluso obispos; ha "enfrentado" al Parlamento español con el vasco, donde se rechazó por mayoría absoluta la ley de partidos.

Además, ha llegado a enfrentar a españoles con vascos, quienes perciben que "la nación española se impone al pueblo vasco", todo ello "en nombre de la Constitución", sn hacer ninguna concesión al diálogo.

Arzalluz criticó también que este proceso se haya iniciado ahora, en unas fechas que se "aproximan escandalosamente" a las elecciones de mayo, y confesó que a la Ejecutiva del PNV le ha producido "profundo desagrado" tratar esta cuestión, aunque no podía dar la espalda a las preguntas de la sociedad.

Por ello, la Ejecutiva del PNV ratificó que el Grupo Parlamentario votará en contra, pese a las "presiones" del PP a "todos" los partidos, con lo que dijo que serefería no sólo a la carta del ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, al Gobierno vasco.

Del mismo modo, aseguró que hará caso omiso a la petición de Batasuna de que no asista al Pleno. "Nunca hemos hecho caso en las cosas que hemos tenido claras", como en este caso, recalcó, por lo que insistió en que los diputados acudirán "como siempre", para "no dar la sensación de que nos escaqueamos" de una decisión "desagradable".

LA "CONFUSION" DE ARENAS

Por otro lado, Arzalluz se refirióa la carta remitida por Arenas al Gobierno vasco, con la que intenta "confundir" la estrategia de partido con la del Ejecutivo, porque "creen que somos como ellos", sin tener en cuenta que en el País Vasco gobierna un ejecutivo tripartito, en el que cada formación votará según sus convicciones.

EL presidente del PNV reiteró a Arenas que está "invitado" a hablar y "oir" al Gobierno vasco para desarrollar el Estatuto, "hecho unos zorros" porque el Ejecutivo central no lo ha cumplido, con lo que "pisan" a ley. Agregó que con el dictamen aprobado por el Gobierno vasco no se pretendía que en dos meses se transfiriesen todas las competencias, sino que "digan de una vez lo que piensan hacer".

En cuanto a la posibilidad de desarrollar un nuevo marco político, recalcó que si el Gobierno popular no se atiene "a las reglas del juego" tampoco tiene por qué hacerlo el Ejecutivo autonómico, y, aunque "no nos tiraremos al monte", apuntó, "la ley y la voluntad popular dan para mucho".

INTROMISION DE ETA

Aralluz hizo referencia también al último comunicado de ETA, en el que la banda terrorista amenaza a quienes apoyen o se abstengan en la aplicación de la Ley de Partidos. A su juicio, la banda terrorista "no tenía que haberse metido en este tema" como lo ha hecho de forma "descarada".

Este "desgraciado" comunicado aumenta la "crispación" al optar por el "enfrentamiento" y el "victimismo", apuntó, para advertir de que no se puede "amenazar" a quienes piensan de otra manera. Agregó que nada en la argumentción de ETA hará cambiar de opinión en las votaciones del día 26.

Por último, recalcó que estas cuestiones "nos alejan de la paz", y crean un escenario que puede "asustar" a cualquiera, pero "a nosotros no", aseguró. "No estamos ni con unos ni con otros, estamos en nuestro sitio".