MADRID

BARAJAS GENERARÁ 333.000 EMPLEOS EN 2010 Y APORTARÁ 20.400 MILLONES DE EUROS AL PIB DE LA CAPITAL

- Oleaga dice que en octubre estará la distribución definitiva del tráfico de las pistas y que su intención no es que desaparezca Belvis del Jarama

MADRID
SERVIMEDIA

El aeropuerto de Madrid-Barajas generará 333.000 empleos (58.000 directos y el resto indirectos) en toda la región cuando alcance todo su potencial tras la ampliación, en 2010, año en el que está previsto que alcance 70 millones de pasajeros, y aportará 20.400 millones de euros al PIB de la capital.

Así se recoge en el octavo Barómetro de Economía Urbana que elabora el Ayuntamiento de Madrid, que incluye un monográfico sobre "El nuevo Madrid-Barajas. Impacto económico".

El barómetro fue presentado hoy en rueda de prensa por el consejero delegado de Economía y Participación Ciudadana del consistorio, Miguel Angel Villanueva, y el director del aeropuerto, Miguel Angel Oleaga.

Villanueva y Oleaga explicaron que la ampliación de Barajas, que ha supuesto una inversión de 6.185 millones de euros, ha permitido la creación de unos 26.000 empleos y un aumento de la aportación al PIB regional de 4.000 millones.

En la actualidad, el empleo total generado por el aeropuerto se sitúa en casi 200.000 puestos de trabajo (el 7% de los existentes en la región), de los que unos 118.000 corresponden a la capital (el 8% de su empleo total).

En 2010, la cifra de puestos de trabajo alcanzará los 333.000 y el PIB asociado a la actividad aeroportuaria también crecerá. Si el PIB de la ciudad de Madrid es en la actualidad de unos 103,2 millones de euros y Barajas representa el 11,9% (unos 12.300 millones), hasta 2010 la aportación habrá crecido en más de 8.000 millones, hasta situarse en 20.400 millones de euros.

Villanueva, quien apuntó que los rendimientos del nuevo Barajas superarán con creces la inversión realizada, destacó que este aeropuerto, el quinto de Europa en volumen de tráfico y el primero en conexiones con América del Sur, es uno de los más productivos, con más de 1.200 pasajeros atendidos por cada trabajador, por encima de los ratios de los aeropuertos de Nueva York, Frankfurt o Londres, aseguró.

RUIDO

Por su parte, Oleaga indicó que, tras la apertura de la nueva terminal T-4 y las nuevas pistas, "estamos en período de velocidad de despegue. Vamos despacito y con problemas que a velocidad de crucero no se tienen. Estamos acostumbrándonos".

Explicó que en los próximos meses y hasta octubre distribuirán adecuadamente a las compañías que se han quedado en las viejas terminales, y las cuatro pistas con que ahora cuenta el aeropuerto irán poniéndose a pleno rendimiento operativo y medioambiental.

Sobre esto último y las quejas de los vecinos próximos a Barajas por la apertura de las nuevas pistas, dijo que a partir de octubre aumentarán el número de operaciones y el tráfico se repartirá al 50% entre las pistas, lo que tendrá un efecto medioambiental positivo. Insistió en que la redistribución definitiva del tráfico entre las pistas estará en octubre y que la de ahora es provisional.

Oleaga explicó que siguen en negociaciones con la alcaldesa de Belvis del Jarama, una localidad de unos 350 habitantes situada apenas a tres kilómetros al norte de las nuevas pistas, así como con otros ayuntamientos afectados por los problemas del ruido tras la ampliación, dentro de la comisión de seguimiento que se creó con la participación de los ayuntamientos.

"Nosotros no queremos que desaparezca Belvis, pero dependerá de cómo queden las negociaciones. Nuestra intención no es que desaparezca", aseguró el director de Madrid-Barajas, quien considera que el desafío del nuevo aeropuerto es mantener o mejorar los estándares de calidad del servicio, teniendo en cuenta las incertidumbres propias del transporte aéreo, como las compañías de bajo coste, de las que dijo que suponen oportunidades y problemas, o la competencia del AVE y de una red de carreteras cada vez mejor.

(SERVIMEDIA)
28 Abr 2006
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