La idea transmitida por el instituto emisor es la de que, tras la celebración de la Junta del 26 de marzo y la inscripción del los acuerdos en el Registro Mercantil, se procedaa la subasta de forma inmediata. Todo el proceso podría estar concluido a finales del próximo mes de abril.

Los flecos pendientes aluden a la cantidad que el adjudicatario, con la correspondiente plusvalía, podría obtener por traspasar una parte de lo adjudicado a otros inversores.

Permanece invariable la decisión de "premiar" a los accionistas con una acción nueva por cada cien antiguas a la par (400 pesetas).

Asimismo, el emisor aconseja que, sea quien sea el adjudicatario, mantenga a Alfrdo Sáenz como máximo responsable del proceso de saneamiento.

Sin embargo, el Banco de España sí ha aceptado la cláusula de salvaguarda que imponen los bancos para acudir a la oferta. Dicha exigencia alude a las contingencias fiscales o de paquetes de autocartera que puedan surgir en un futuro próximo, y de los que deberá hacerse cargo el Fondo de Garantía de Depósitos.