Dentro de la política de Estado española, siempre se ha cuidado con especial interés la buena vecindad con el país magrebí, por encima de contenciosos coyunturales como el que ahora mantiene Marruecos con la UE por la pesca.

Un contencioso que afecta a 415 barcos españoles que faenan en aguas del Rino Alauí y a miles de familias que se ven obligadas a cobrar un sustento del Estado mientras se resuelve el conflicto entre Rabat y Bruselas.

En la actualidad, explicaron las mismas fuentes, se está cerrando la agenda del viaje de Aznar, que es similar al que efectuó hace cuatro años al país magrebí en su primera visita como presidente.

Después de ese viaje, otra gran cita que le espera al presidente del Gobierno es la `cumbre' ministerial hispano-francesa que se va a celebrar el próximo 23 de myo en el Palacio de La Magdalena, en Santander, según han confirmado esta tarde a esta agencia fuentes gubernamentales.

En esa cita, argumentan estas fuentes, por encima de los asuntos tradicionales entre ambos países, va a figurar el acuerdo político que Francia está interesada en obtener de España de cara a la Presidencia de la UE que le toca ejercer de junio a diciembre próximos.

El día a día de la cooperación contra ETA recae fundamentalmente en las reuniones que semestralmente celebran las cpulas policiales de ambos países. El pasado 16 de diciembre, el secretario de Estado para la Seguridad, Ricardo Martí Fluxa, y los directores de la Policía y la Guardia Civil se reunieron en Paris con sus homólogos franceses para intercambiar información.

No obstante, esta será la primera reunión bilateral con rango superior desde la visita a España que hizo el presidente francés, Jacques Chirac, el pasado 4 de octubre, y se está preparando con discrección por razones de seguridad, dada la proximidad e la capital cántabra con el País Vasco.

Tradicionalmente, recuerdan las fuentes consultadas, las autoridades francesas han considerado a ETA un asunto interno español, pero los acontecimientos de los últimos meses parecen estar variando ese planteamiento.

La confirmación de que el atentado contra un McDonald's, por parte de nacionalistas bretones, fue cometido con dinamita robada junto con ETA en Plevín y la unificación de las juventudes radicales nacionalistas vascas a ambos lados de la fronter, son dos hechos vigilados muy de cerca por el Ministerio del Interior galo que teme una extensión del conflicto al país vecino.

En esa reunión, además, se debatirán los grandes ejes de comunicación en marcha (AVE Madrid-frontera francesa y el túnel que atraviesa la frontera Franco-Aragonesa por Canfranc (Huesca), además de la reivindicación navarra de la mejora de su conexión con Francia.