En esa fecha, la corporación municipal informó favorablemente la solicitud de la empresa pública Tres Cantos S.A., para abrir a los vecinos el aparcamiento de la estación del tren de cercanías, cuyos terrenos son propiedad del ayuntamiento.

Según fuentes municipales, la autorización fue cocedida con la condición de que la empresa gestora presentara un plan de viabilidad para la explotación del aparcamiento y solicitara las oportunas licencias de obra de apertura y de primera ocupación.

Sin embargo, Tres Cantos S.A. encargó las obras de cercado del aparcamiento a la empresa Boninsa sin concurso público ni notificación al ayuntamiento, y las obras comenzaron sin que el municipio concediera las licencias.

El acuerdo del mes de octubre estableció también los precios para la ocupación el aparcamiento en 15 pesetas para los visitantes y 10 para los vecinos empadronados en la localidad, lo que provocó las quejas de los habitantes de Tres Cantos, que inciaron una campaña de protestas antes de Navidad para conseguir el servicio gratuito.

Para el grupo de opsición en el ayuntamiento, IU, la cesión a Boninsa es "por lo menos sospechosa", mientras que el PP considera que el aparcamiento es antieconómico y propugna su caracter gratuito "porque si no la gente aparcará antes fuera que dentrodel estacionamiento", según explicó un portavoz del partido.

En el mismo sentido se expresó el presidente de Boninsa, Adolfo Quirós, que señaló que su empresa es la "primera interesada en que el aparcamiento sea gratuito para el centro comercial y la estación, ya que los estudios económicos demuestran que vigilar este espacio no es rentable".

Para Quirós, la paralización de las obras ha sido correcta porque no existía autorización previa para iniciar los trabajos.

"Estábamos cerrando los apacamientos en función de una carta de Tres Cantos S.A. en la que se nos obligaba a cumplir unos plazos", explicó. "Lo que ocurre, y a mi entender es lo más grave, es que la gestora y el ayuntamiento no se ponen de acuerdo para emitir los permisos y la descoordinación es negativa tanto para los vecinos como para los empresarios".

Las obras seguirán paralizadas hasta que ambas entidades decidan cómo explotar el aparacamiento vigilado. De momento, las instalaciones pueden seguir siendo utilizadas por los ecinos de Tres Cantos de forma gratuita.