Movilidad

El avión enlaza casi seis veces más grandes ciudades europeas que el tren

- Según Greenpeace

MADRID
SERVIMEDIA

El 69% de las grandes ciudades europeas están conectadas con vuelos directos de avión, mientras que apenas un 12% están comunicadas entre sí por tren, lo que supone casi seis veces más conexión vía aérea que por medios ferroviarios.

Esa es la principal conclusión de un estudio realizado por Greenpeace con datos de 45 grandes ciudades europeas. La organización solo excluyó los cinco países más pequeños y Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia y Rusia. Fueron analizadas la capital de cada país, salvo Suiza, que se eligió Zúrich en lugar de Berna.

Además, se excluyeron Helsinki y Tirana porque no existe ni puede haber ninguna conexión ferroviaria en un plazo de 18 horas con ninguna otra gran ciudad europea.

El análisis se basa en 990 rutas entre 45 grandes ciudades del continente europeo. En lo que respecta a las localidades españolas examinadas (Barcelona, Madrid y Valencia), están mal conectadas con otros países mediante trenes directos. Las dos únicas líneas ferroviarias directas son Madrid-Barcelona-Marsella y Barcelona-Lyon-París.

Actualmente, tampoco hay ningún tren nocturno que circule desde o hacia España para conectar con el resto de las capitales europeas. Tampoco dentro del propio país, en el que desde la pandemia de la covid-19 no han vuelto a restablecerse rutas nocturnas como las que conectaban Madrid con A Coruña, Pontevedra y Ferrol, y Barcelona con A Coruña y Vigo.

ESPAÑA

El estudio refleja que, gracias a la red ferroviaria de alta velocidad de España y Francia, es elevado el número de ciudades a las que se podría llegar en tren directo desde el territorio español a otras localidades europeas en menos de 18. Así, Valencia podría conectar con 16 grandes municipios del continente, Barcelona con 36 y Madrid con 17.

Mientras que hay pocas conexiones directas por tren, sí existen vuelos directos desde Madrid, Barcelona y Valencia a casi todas las ciudades analizadas.

Por lo tanto, todas las ciudades españolas analizadas están mucho mejor conectadas por avión que por ferrocarril, lo que anima a la ciudadanía a volar en lugar de coger el tren.

"Durante años, Europa ha favorecido el transporte aéreo, mucho más perjudicial para el clima que el tren, a través de exenciones fiscales, mientras que las inversiones en trenes e infraestructuras ferroviarias han sufrido años de abandono. Hoy vemos cómo nuestra red ferroviaria tiene un considerable potencial sin explotar de trenes directos, debido a unas prioridades de gasto en movilidad equivocadas”, según Cristina Arjona, coordinadora de la campaña de Movilidad de Greenpeace.

Arjona añade: “Es hora de que los distintos países y la Unión Europea corrijan este desequilibrio histórico mejorando la conectividad y la comodidad de los trenes y acabando con las ventajas injustas de la industria aérea. Los europeos merecen tener acceso a un transporte público limpio, eficiente, cómodo y asequible que sea bueno para ellos y para el planeta”.

CONEXIONES DIRECTAS

Greenpeace apuntó que los trenes directos ofrecen numerosas ventajas sobre los trenes con conexión: son más cómodos, más fiables y, en general, más baratos, lo que anima a la gente a utilizarlos en lugar de apostar por otras alternativas más contaminantes, como el coche o el avión.

A pesar de ello, en ninguna de las ciudades analizadas por Greenpeace se aprovecha plenamente el potencial de los trenes directos. Incluso Viena (Austria), la ciudad con más conexiones ferroviarias directas de Europa, solo tiene trenes directos en el 59% de las rutas posibles.

Sin embargo, partiendo de las vías y horarios actuales, existe potencial para que pudiese triplicarse el número de trenes directos en Europa.

El estudio refleja que no existen conexiones directas en tren en algunas de las rutas más importantes del continente, como Madrid-Lisboa, Madrid-París, París-Roma o Londres-Berlín, que, sin embargo, se encuentran entre las rutas aéreas de corta distancia más transitadas de Europa, con más de dos millones de pasajeros al año, cuando estas rutas se podrían recorrer en tren directo en menos de 10 horas y 30 minutos.

PROPUESTAS

Greenpeace pidió a la Comisión Europea que acelere las medidas anunciadas para impulsar el transporte ferroviario transfronterizo en Europa, como un sistema unificado de información sobre trenes en el que participen todas las compañías ferroviarias con regulares de pasajeros, un sistema unificado de reservas que permita la compra de billetes directos para todas las rutas de Europa, precios más asequibles con abonos únicos de transporte o billetes climáticos y una mayor armonización técnica y jurídica.

“La Comisión Europea y los Estados miembros deben adoptar medidas eficaces para crear condiciones de igualdad entre las compañías aéreas y el ferrocarril, como la introducción de un impuesto efectivo sobre el queroseno, la supresión del IVA del tren sobre los billetes internacionales en todos los países o medidas contra el ‘dumping’ salarial en el sector de las aerolíneas de bajo coste”, concluyó Arjona.

(SERVIMEDIA)
07 Jul 2024
MGR/clc