Según los ecologistas, las obras del túnel de Guadarrama han sufrido, al menos, cuatro accidentes graves desde su inicio, uno de ellos en el túnel existente en el municipio madrileño de Miraflores de la Sierra, donde murieron dos trabajadores; dos hundimientos en menos de un es que han afectado a uno de los enclaves de mayor valor ambiental de la Sierra de Guadarrama, el Pinar de Valsaín, y el siniestro de ayer.

Ecologistas en Acción considera que los incidentes que están ocurriendo en las obras de los túneles de Guadarrama son alarmantes, tanto por las graves consecuencias para la seguridad de los trabajadores como por sus importantes consecuencias ambientales.

La asociación lamenta que, a pesar de los 4.000 millones de pesetas invertidos en los sondeos y estudios gotécnicos previos al inicio de las obras y de contar con suficientes datos como para conocer la sierra palmo a palmo, el GIF está siendo incapaz de salvar las primeras dificultades del trazado.

Además, los ecologistas advierten de que las consecuencias de esta supuesta incompetencia pueden ser más graves que en el caso del AVE a Barcelona, ya que la alternativa del túnel a través de la Sierra de Guadarrama es la más compleja, la más arriesgada y la más cara, ya que la montaña está formada por granito,gneiss, fallas arenosas y diques.

A su juicio, el argumento de Fomento de bajo impacto ambiental se ha demostrado falso por los hundimientos en Valsaín, donde hay importantes especies emblemáticas y amenazadas de la fauna ibérica. Ecologistas en Acción teme por lo que pueda suceder cuando las tuneladoras se dispongan a atravesar el Valle de Lozoya, una de las joyas naturales de la sierra.