La Fiscalía sostiene que el acusado y otras cinco personas que no han sido identificadas detuvieron el autobús que cubre el itinerario Valle de Trápaga-Portugalete, en Vizcaya, obligaron a descender al conductor y a los viajeros y prendieron fuego al vehículo utilizando gasolina ycócteles molotov.

La representante del Ministerio Público entiende que el hecho de que los participantes en la quema del autobús portasen pasamontañas, con los que ocultaban sus rostros, es una circunstancia agravante en los delitos imputados. Asimismo, pide que el acusado indemnice a la empresa propietaria del vehículo con 34.917 euros.

Días después, el hecho fue reivindicado en el diario "Gara", junto a otras acciones de la denominada "kale borroka", en respuesta a las detenciones de representates del movimiento pro-amnistía.