Con esta decisión, devuelve al magistrado la instrucción de la causa en esas piezas separadas. El tribunal concluye que “no se aprecia en ninguno de los episodios descritos, y teniendo en cuenta la interpretación restrictiva que debe prevalecer, la concurrencia de la causa de recusación de tener interés directo o indirecto en el pleito o causa alegada por el recusante”.

Además, la pasada semana la Audiencia de Barcelona rechazó la última petición de prórroga que dirigió el juez Aguirre para seguir investigando este caso y le ordena que archive la investigación o la envíe a juicio.

En este caso, que tuvo su origen en la investigación de financiación ilegal del independentismo, se ha estudiado también la presunta injerencia rusa en el 'procés'. Tras la decisión de la Audiencia, el juez Aguirre sólo podrá usar la información recopilada hasta el 1 de agosto de 2023. El magistrado ha estado tratando de dar con pruebas para imputar a Carles Puigdemont, por alta traición, un delito no incluido en la Ley de Amnistía, y elevar la causa al Tribunal Supremo, dada su condición de aforado.