Melchor indicó que todavía no están evaluados los daños materiales provocados por las explosiones de las bombas, que causaron cnco heridos, aunque afirmó que son considerables dado que uno de los establecimientos ha debido de ser apuntalado y el otro permanecerá al menos cerrado durante 10 días, lo que supondrá importantes pérdidas.

"Vamos a intentar que los estamentos oficiales palien el golpe que los atentados van a suponer a los restaurantes afectados", precisó Melchor, quien señaló que están analizando las pólizas de seguro de los establecimientos dañados para ver si cubren los desperfectos causados por las bombas.

Pra el secretario general del Gremio de Restauración de Barcelona, con los atentados de ayer, "ETA ha conseguido lo que quería, hacer un golpe de efecto", por lo que, a su juicio, es poco probable que repita acciones similares en la capital condal, sino que los terroristas continuarán con su campaña en otros puntos del país.

Melchor indicó que, tal como ocurrió ayer en el que los artefactos fueron colocados por los terroristas en los servicios de los establecimientos, "es imposible detectar que alguiente deje algo en los lavabos".

Finalmente, aunque dijo que tras estos atentados, los propietarios de los restaurantes de Barcelona extremarán la vigilancia, "eso será en los primeros meses y luego irá cayendo en el olvido", concluyó.