En una rueda de prensa celebrada esta tarde en la sede de Interior, Rajoy aseguró que este último "comando Madrid" estaba formado por los detenidos Aitor García Aliaga y Ana Belén Egüés Gurrutxaga, junto al huido Juan Luis Rubenach Roch, que se encuentra en paradero desconocido.

El minstro explicó que los dos primeros etarras, capturados esta mañana gracias a la colaboración ciudadana, son los autores con certeza, junto a Rubenach Roch, de cinco de los últimos atentados con coche-bomba cometidos en Madrid.

Estas acciones serían la explosión de un vehículo en la calle Goya el 11 de mayo, que sólo causó daños materiales; el asesinato del general Justo Oreja; el coche-bomba en la calle Ocaña que provocó la muerte del policía Luis Ortiz; el vehículo que explotó el 12 de octubre en el sbterraneo de la Plaza de Colón; y el coche que explotó esta mañana en la calle Corazón de María.

No obstante, el ministro no pudo confirmar que este comando estuviese detrás del vehículo que explotó este verano en el aeropuerto de Barajas, ni que estos etarras fuesen los autores del asesinato del magistrado Francisco Querol Lombardero, acción que también causó la muerte a su chófer y a un conductor de autobús.

HABITACIONES DE ALQUILER

El titular de Interior informó de que, tras la detención de itor García y Ana Belén Egüés, gracias a la "inestimable" ayuda ciudadana, las fuerzas policiales han localizado un "piso franco" del comando en la ciudad de Salamanca y tres viviendas en Madrid que utilizaban para ocultarse.

El piso de la capital salmantina fue definido por Rajoy como el centro de operaciones del comando, en el que escondían entre 20 y 40 kilogramos de explosivo Titadine, 2 subfusiles, 17 juegos de matrículos -algunas de ellas en blanco-, un ordenador, material eléctrico y diversa doumentación.

Por lo que se refiere a los pisos de Madrid, estos estaban situados en las calles Adelfas, Estudios y Servando Batanero. Rajoy explicó que los pisos no estaban alquilados en su totalidad por los terroristas, sino que ocupaban alguna de las habitaciones, mientras que otras personas residían en el resto de la casa.

Respecto a la forma de proceder de los miembros de este comando, el ministro afirmó que se desconoce dónde montaban los vehículos con explosivos, aunque no se descarta que sededicasen a traer el contenido de las bombas de Salamanca y montar los artefactos en la calle.

Por último, Rajoy destacó la colaboración "modélica" de los ciudadanos, y dijo que está garantizada la seguridad del testigo que condujo durante un cuarto de horas tras los terroristas para que la policía pudiesen detenerlos.