Al parecer, alguién abandonó el pasado sábado en un bar del barrio viejo de la capital guipúzcoana dos juguetes: un muñeco con forma de jirafa y un coche. Esta mañana, sobre las 10.45 horas, los hijos de la propietaria del mismo establecimiento cogieron ambos juguetes y montaron, en compañía de su madre y de su abuela, en el vehículo participar de la failia.

Dentro del vehículo, y apenas recorridos unos pocos metros, el juguete-bomba explosionó, presumiblemente por la manipulación de uno de los niños. Como consecuencia, la abuela de los niños murió en el acto.

Uno de los nietos, de dos años, sufrió heridos de gravedad en el cuerpo y en la cara y fue trasladado de inmediato al Hospital Donostia, anteriormente conocido como Nuestra Señora de Aranzazu. Su hermano, de cuatro años, sufrió una crisis nerviosa y fue atendido en el lugar de los hechos or especialistas sanitarios, ya que no fue necesario su traslado.

La explosión tuvo lugar a las 10.45 horas en la confluencia de las calles Aldamar y Euskal Herria de San Sebastián y, según las mismas fuentes, fue de escasa consideración, aunque ha acabado con la vida de una mujer de unos 40 años y ha causado heridas graves a un niño de dos años.