Villar apuntó, no obstante, que el Gobierno no cederá al chantaje de ETA y advirtió que el asesinato del guardia civil José Manuel García Fernández "no es otra muerte inútil que no sirve para nada".

Aseguró que al agente fallecido seá sustituido por otro, "pero eso sí, ya han roto otra familia y, aunque no habí hijos, sí hay una mujer transida de dolor, porque no solamente le han matado a su marido, sino que se lo han matado delante de ella. Estos señores deben tener la sensibilidad en el menos cero absoluto".

A su juicio, la realización de dos atentados, el de ayer y el que el pasado 24 de abril costó la vida al inspector de policía Luis Andrés Samperio, hace pensar que el 'comando Vizcaya' tiene una sólida estructura en este territorio. Villar rechazó ofrecer más detalles sobre las investigaciones que se stán desarrollando, ya que "cualquier desliz hace perjudicar la investigación".

Mientras tanto, las versiones contradictorias sobre la descripción física del autor material del asesinato están dificultando la identificación del miembro del comando. Según algunos testigos, se trata de una persona de pequeña estatura, mientras que otros apuntan que es un hombre "alto y fuerte".

Continúa abierta, por otra parte, la operación de búsqueda del vehículo utilizado por los terroristas para huir. Según tesigos presenciales, se trata de un R-11 de color gris, aunque este dato no ha sido confirmado.

El funeral por José Manuel García Fernández tendrá lugar mañana por la mañana en Bilbao. Probablemente el cuerpo será trasladado por la tarde a su pueblo natal, San Esteban de Coaña, en Asturias, donde será enterrado.