De esa cantidad, el 49 por ciento (191.000 millones de pesetas) corresponde a la cobertura de necesidades básicas de las personas mayores y minusválidas, a través de las "prestaciones no contributivas", incluída una revalorización del 6,4 por ciento.

Así, las pensiones correspondientes a la Ley de Integración Social de Prsonas con Minusvalía (LISMI) absorben 108.117 millones; las pensiones no contributivas (PNC) de jubilación, 53.331 millones, y las PNC de invalidez, 29.977.

Bajo el lema "envejecer en casa", el MAS destinará 62.382 millones de pesetas al desarrollo de la red de servicios domiciliarios, comunitarios y residenciales que posibiliten la permanencia de los mayores en su propio entorno y, cuando ello no sea posible, les permita acceder a residencias adecuadas.

Esa cantidad supone un incremento presupustario del 19 por ciento y la puesta en funcionamiento de 12 nuevos establecimientos: 6 residencias con 1.100 plazas nuevas y 6 hogares o centros de día.

Los servicios e infraestructuras de la Seguridad Social para personas mayores y personas con discapacidad crecen un 17 por ciento.

Además de los mencionados 62.382 millones, Asuntos Sociales destinará 4.000 millones a nuevos equipamientos para los mayores en colaboración con las autonomías, que aportarán otro tanto, con un crecimiento del 60 porciento en la inversión.

Los programas destinados a atender a las personas con minusvalía crecen un 8 por ciento y alcanzan la cifra de 29.114 millones de pesetas. En 1993 se abrirán 5 nuevas residencias para minusválidos agudos y aumentarán los servicios de rehabilitación y recuperación profesional con el apoyo financiero del Fondo Social Europeo.

Las transferencias desde el ministerio a las comunidades autónomas aumentan globalmente en un 21 por ciento. Para la Red Básica de Servicios Sociales e las Corporaciones Locales, financiada entre Administración central, autonomías y ayuntamientos, el MAS aporta 8.700 millones, 500 más que este año.

CASAS DE ACOGIDA Y ALBERGUES

Esa cantidad se inscribe dentro del proyecto de generalización de la red de centros de servicios sociales, de casas de acogida y albergues destinados a los colectivos con mayor riesgo de marginación social.

En cuanto a los programas que impulsan la calidad de vida y el bienestar de todos los ciudadanos, los de Vacacione para la Tercera Edad y Termalismo Social, que crecen un 25,7 por ciento, beneficiarán a más de 400.000 personas.

El programa de Prestaciones Técnicas para hacer accesibles las ciudades a toda la población, que incluye eliminación de barreras urbanísticas y de la comunicación, accesibilidad a los transportes y nuevas tecnologías aplicadas a la discapacidad, se ve incrementado en un 19 por ciento.

También crece un 20 por ciento el presupuesto para la Red de Centros y Servicios para niños menores d 3 años, financiada conjuntamente con comunidades autónomas y ayuntamientos y dirigida a las familias con menos recursos o en situación de actividad laboral. En total, para primera infancia Asuntos Sociales destina 5.607 millones de pesetas.

En cuanto al descenso de las aportaciones para el Instituto de la Juventud (Injuve) y el de la Mujer, que es de 255 y 47 millones, respectivamente, porcentualmente equivalen a un 7,12 menos para juventud y a un 2,05 menos para mujer. En 1993, el Injuve dispondrá d 3.328 millones y el Instituto de la Mujer de 2.250.

Esas limitaciones de crédito "significan una ralentización en los ritmos de las políticas de igualdad de oportunidades y de trato que no afectan a los programas básicos de los institutos, sino a aquéllos que, por sus características, pueden dilatarse en su ejecución, como los programas de viviendas para jóvenes universitarios en colaboración con universidades y ayuntamientos o los progrmas de investigaciones y estudios en el área de mujer", señalaro las mencionadas fuentes.

Los servicios sociales y programas de igualdad para refugiados reciben 3.626 millones y para otros colectivos 5.942 millones.

Además, Asuntos Sociales repartirá entre las organizaciones no gubernamentales que participan en el desarrollo de políticas de bienestar social más de 10.000 millones de pesetas procedentes de la partida del 0,52 por ciento del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.