El PP retiró ayer su confianza al presidente del Principado, Sergio Marqués, con 19 votos en contra frente a los 5 diputados leales, y le instó a abandonar el Gobierno asturiano o pasar al Grupo Mixto, opciones ambas rechazadas hasta el momento por el jefe del Ejecutivo regional.

Ante esta situación, Llamazares reiteró su intención de sacar adelante una moción de censura, para lo que es necesaria una mayoría absoluta, que sólo se obtendría sumando a los de IU los votos del principa partido de la oposición, el PSOE, y el del Partido Asturianista, con el objeto de favorecer un nuevo Gobierno hasta las próximas elecciones.

En la carta al secretario general de FSA-PSOE, Luis Martínez Noval, el coordinador de IU responde a la acusación del PSOE de que la coalición política impidió un Gobierno de izquierdas en las anteriores elecciones, uno de los motivos en que el grupo socialista basa su rechazo a un acuerdo con IU para derribar a Marqués.

"Vuestra respuesta a la iniciativa", eñala, "ha consistido en el reproche ante nuestra actitud en 1995, donde según vosotros facilitamos el gobierno de la derecha, o bien de juicio de valor calificándola de lavado de cara o de muestra de una supuesta mala conciencia".

En este sentido, LLamazares subraya que "no compartimos vuestra visión de los acontecimientos que en 1995 dieron lugar al gobierno de la derecha en Asturias", lo que atribuye a "vuestros errores (del PSOE) en la política general y más concretamente en Asturias" que, a su jucio, "impidieron un acuerdo de izquierdas frente a la derecha".

No obstante, destaca que a pesar de las diferencias "tampoco minusvaloramos las coincidencias que a lo largo de estos tres años de legislatura hemos logrado en la oposición", por lo que apunta que no es sólo la necesidad excepcional de hacer frente a "un gobierno sin legitimidad", sino también "las coincidencias programáticas" lo que llevan a IU a reiterar formalmente la oferta de "iniciar de inmediato conversaciones encaminadas a la confguración de una alternativa de izquierdas".

Asimismo, resalta que "el mantenimiento en el tiempo de un gobierno tránsfuga, sean cuales sean las razones que lo hayan provocado, significaría un retroceso político a la vez que un deterioro institucional y una degradación de los valores cívicos y democráticos sin precedentes".

"Por otra parte", agrega, "este gobierno, sin apoyo parlamentario, sería un gobierno incapaz de garantizar una gestión mínimamente estable y más aún liderar los importantes rets pendientes de Asturias en materia de concertación social, así como de garantizar el compromiso con la Administración Central en cuestiones vitales para Asturias como las politicas de industrialización, infraestructuras, medio rural, etc".

En los mismos términos, Llamazares se dirige al presidente del Partido Asturianista, Xuan Xosé Sánchez Vicente, en una carta en la que subraya que "la crisis de poder y de intereses en el seno del PP en Asturias ha provocado en las últimas fechas la ruptura del Gruo Parlamentario Popular en el Parlamento del principado, y la consecuente pérdida de base parlamentaria y legitimidad democrática del Gobierno de Sergio Marques".