Según los autores de los destrozos, valorados en más de treinta millones de pesetas, el edificio está destinado a albergar un Centro de Atención a Drogodependientes (CAD), a lo que se opusieron desde un principio por considerarlo peligroso.

El alcalde electo de Madrid, José María lvarez del Manzano, desmintió esas afirmaciones y aseguró que en ese terreno se está edificando un centro de salud.

La asociación, que apoya los argumentos de los vecinos contra la construcción del CAD, expresó su repulsa por estos hechos vandálicos, ya que "no se puede justificar ningún tipo de violencia", afirmó en una nota.

Además, hizo un llamamiento "al buen sentido" de los vecinos que, en su opinión, "han sido manipulados, engañados y movidos a una actitud de la que a estas alturas ya estánarrepentidos".

Los representantes vecinales aseguraron que continuarán presionando para que el ayuntamiento no construya un CAD en el distrito.