"Consideramos incomprensible que el representante de una de las más altas instituciones del Estado no actúe de forma contundente contra los símbolos de una dictadura y ceda un espacio privilegiado en la sede de la soberanía popular para unos hombres que utilizaron la violencia o se aprovecharon de ella para obtener sus cargos institucionales", indica la asociación.

La ARMH recuerda que el 20 de noviembre de 2002 la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados aprobó una resolución por la que condenaba la dictadura franquista por unanimidad, que incluía varios artículos relativos al respeto que merecen desde las instituciones las víctimas de la represión franquista.

La asociación considera que "el presidente del Congreso de los Diputados debe respetar por igual a las víctimas de todas las violencias y no lo hace al tomar esa decisión. En un país donde todavía miles de ciudadanos permanecen en fosas comunes a causa de la represión franquista no se puede dar reconocimiento a quienes causaron, alentaron o se aprovecharon de esos crímenes para obtener el poder y llegar a presidir las Cortes franquistas".

A juicio de la ARMH, "con la actitud de José Bono se aceptaría poner en la galería de presidentes del Parlamento un retrato del golpista teniente coronel Tejero, que durante unas horas de triste recuerdo fue quien dirigió los designios de la Cámara el 23 de febrero de 1981 y que para acceder a esa posibilidad de 'dar órdenes' a los diputados y diputadas utilizó el mismo método que los tres presidentes franquistas de las Cortes".

La ARMH presentará a través del Registro de la Cámara Baja una petición al presidente del Congreso para que retire los retratos de Esteban Bilbao, Antonio Iturmendi y Alejandro Rodríguez Valcárcel, y además solicitará la creación de un día al año en el que el Parlamento honre a todos los hombres y mujeres que de algún modo padecieron la dictadura.