"En el caso de los menores hay que andar con el máximo cuidado y la máxima exquisitez, y evita desde dar los nombres hasta las fotografías que puedan atentar contra la intimidad personal", señaló a Servimedia José María Torre Cervigón, que puntualizó que se trata de su opinión personal, no de la FAPE.

En su opinión, este principio, que está en todos los códigos deontológicos, sólo podría ser roto en casos excepcionales. "Esa es la pregunta que habría que dilucidar", indicó. "Evidentemente, el criterio queda a la moral de cada uno, pero en principio el criterio es contrario a todo lo que sea failitar datos e imágenes de un menor".

"Yo no considero correcta la publicación de estas imágenes. En este caso, creo que es suficiente ofrecer la información sobre el caso con las caras oscurecidas de las jóvenes presuntamente implicadas", añadió.