En un comunicado, Asaja expresa "su profundo malestar" por la desaparición del Ministerio de Agricultura y pide a la que fuera ministra del ramo que lidere la defensa del sector agrario y trabaje por la competitividad de la agricultura española.

En opinión de Asaja, la gestión y optimización del agua que, para la agricultura de futuro resulta imprescindible, hace necesario "aplicar una política hidráulica que, lejos de las disputas partidistas, dé estabilidad y cohesión al territorio".

En este sentido, considera "prioritario alcanzar un consenso respecto a un verdadero plan que regule los recursos y distribuya la riqueza, porque para la agricultura el agua es sinónimo de riqueza y nuestra legítima pretensión es tener garantizado este bien".