"No les perdono a ninguno", reclacó la madre en declaraciones que difundió la cadena Ser, "y ójala que ellos sufranlo mismo que yo. A ver si se mueren todos y nos dejan ya tranquilos, vivir en paz".

Arantxa Asla no pudo reprimir la emoción y la pena por el trágico suceso, y recalcó: "yo no les perdono; yo no hago como otra gente que perdona. Yo sólo quisiera echármelos a la cara y que sepan también lo que es sufrir, como me están haciendo sufrir a mi ahora".

La madre del niño asesinado por los etarras explicó el modo con que se había enterado de la muerte de Fabio con estas palabras: "estaba en la puerta del olegio esperándoles a que salieran todos y, al ver que no venían, me avisó un señor de que había pasado algo. Fuí hacia casa para ver qué había ocurrido porque no llegaban y luego ya me lo dijeron".

"¿Y que voy a decir, qué se puede decir de lo que han hecho con mi hijo? ¿Qué se puede decir de esos sinvergüenzas, asesinos, malnacidos. No tienen otro nombre. No hay derecho a lo que han hecho", concluyó.